En primer lugar, picamos lo más finamente posible, la cebolla, los pimentos y los ajos.

En una cazuela, ponemos el aceite de guindilla, el de ajo y perejil y cuando este caliente.

Añadimos todo lo que hemos picado y sofreímos un par de minutos.

Pasados el par de minutos, le añadimos la pastilla de caldo, los gajos de lima, el perejil, la salsa thai, todas las especias y la sal de algas.

Removemos para mezclar.

Tapamos y dejamos sofreír durante dos o tres minutos, para que no se pierdan las aromar de las especias.

Mientras tanto, pelamos las patatas y las chascamos.

A continuación, destapamos la cazuela.

Añadimos las patatas y el tomate frito.

Llegando a este punto, es muy importante rehogar las patatas durante un par de minutos sin dejar de remover, para que absorbar todo los jugos y sabores de las especias, antes de añadirle el agua, para que estén verdaderamente sabrosas.

A continuación, cubrimos de agua solo hasta cubrir como en la foto y removemos un poco para que el sofrito no se nos quede pegado al fondo.

Tapamos y dejamos cocinar durante ocho o dieiz minutos, dependiendo del tipo de patatas que le pongamos..

A continuación, le damos tres o cuatro cortes superficiales al salmonete por ambos lados. Le ponemos sal con generosidad, y antes de ponerlo en el guiso, lo enjuagamos ligeramente para quitarle el exceso de sal.

Pasado el tiempo de cocción de las patatas, destapamos la cazuela y le ponemos el pescado en el centro.

Con una cuchara, le vamos poniendo por encima la salsa para que nos ayude a que se haga por arriba, porque no le vamos a dar la vuelta.

Por último tapamos, bajos el fuego y dejamos cocinar diez o doce minutos dependiendo del tipo y peso del pescado.

Listo para disfrutar.