En primer lugar dejaremos las pasas a remojo en agua durante 1 hora. Calentamos dos cucharadas soperas de aceite en una sartén grande. Mientras se calienta salpimentamos al gusto los solomillos de pavo. Una vez caliente el aceite cocinamos el pavo unos 5 minutos por cada lado, hasta que estén doraditos. Una vez estén doraditos los colocamos en un plato y reservamos. En esa misma sartén calentamos una cucharada más de AOVE y salteamos el ajo y el puerro.

Una vez estén doraditos el puerro y el ajo, añadimos primero las pasas, cocinamos unos minutos y después agregamos los piñones. A continuación añadimos las espinacas y tapamos la sartén con una tapa.

Destapamos la sartén pasados unos 3-4 minutos y mezclamos bien todos los ingredientes, las espinacas habrán perdido su tamaño y se habrán rehogado, ahora es momento de añadir medio brick de vino, tapamos y cocinamos durante 10 minutos.

Añadimos el queso de cabra cortado en trocitos, movemos bien y cuando empiece a derretirse añadimos el vino restante que nos queda en el brick. Movemos y mezclamos bien todos los ingredientes tapamos y dejamos cocinar otros 5 o 10 minutos para que reduzca el vino. Ahora introducimos en la sartén los trozos de solomillo reservados anteriormente.

Añadimos la cucharadita de miel, bajamos a fuego suave, tapamos la sartén y dejamos cocinar otros 5 o 10 minutos más moviendo cada minuto la sartén para que no se pegue.