En la fuente en que se servirá, poner una capa de pan, untarlo con mayonesa (se la puede diluir un poco con leche) y cubrir con jamón picado bien chiquito y tiritas de tomate. Cubrir con otra feta de pan.

Procesar las arvejas con una cda. salsa tipo mayonesa.

Untar el pan con la pasta de arvejas y picar huevo. Otra rebanda de pan (o panqueque o lo que se haya elegido).

Ablandar el queso con un chorrito de leche o de agua hervida y añadir ciboulette y pimienta negra a gusto.

Disponer sobre el pan untado con queso, trocitos de tomate y de pollo asado.

Sobre otra feta de pan disponer mayonesa, zanahoria rallada y trocitos de aceituna. Si quedó crema de arvejas, hacer una capa más, con huevo o con aceitunas o con tomate o con jamón.

Colocar la última capa de pan y, si no se va a servir de inmediato, cubrir con paño húmedo y guardar en heladera. Cuando se lo vaya a servir, untar todo con mayonesa o salsa golf, como si fuera el baño de una torta.

Decoración infaltable en este plato de mamá era la lechuga en juliana finita, cubriendo todo. Luego decoraba con tomate, huevo duro, aceitunas, etc.

Cuando se ha preparado con antelación, el pan llega casi a desaparecer.