Descorazonamos las manzanas, las partimos las manzanas por la mitad y cortamos en láminas muy finas. NO las pelamos, nos interesa que quede el borde rojo de la piel.

Exprimimos el limón, ponemos el zumo en un cuenco, echamos las láminas de manzana, un poquitín de azúcar moreno y canela y removemos muy bien pero suavemente para no romper la manzana, para que se impregnen de zumo.

Ponemos el cuenco 2 minutos en el microondas a máxima potencia para que las láminas queden flexibles y podamos envolverlas sin que se rompan.

Estiramos el hojaldre sobre una superficie azucarada y cortamos tiras anchas.

Untamos cada tira con mermelada de cereza, espolvoreamos con azúcar y colocamos casi al borde de la masa (mitad hacia arriba y con la parte roja sobresaliendo), láminas de manzana superpuestas como si formarais un arco.

Doblamos la masa hacia arriba llegando a las manzana y enrollamos la tira sobre sí misma y los colocamos dentro de un papel para cupcakes.

Ponemos los rollitos en una bandeja para hornear cupcakes, si la tenéis para muffins mejor, o en su defecto dentro de una flanera de aluminio individual y espolvoreamos con azúcar moreno.