Ponemos en una cacerola a hervir el agua con la leche y una vez hirviendo añadimos la avena y el salvado de trigo(esto lo uso siempre para añadir un extra de fibra ya que nunca consumo la suficiente fibra diaria que ronda entre los 20-25g diarios)

Removemos todo y añadimos el sobre de estevia, un poco de canela en polvo y la proteína(en mi caso usé la de sabor chocolate y mantequilla de cacahuete)

Cuando empiece a echar burbujitas y tenga una textura un poco espesa lo sacamos y apartamos en un bowl. No paréis de removerlo ni lo dejéis mucho tiempo ya que en cuestión de 2 o 3 minutos estará listo a fuego medio bajo. Si al final se os pasa un poco y se queda una textura pastosa añadirle un poco más de leche para darle más cremosidad.

Por último cortamos las nueces en trozos pequeños para aportar grasas saludables a nuestra avena y listo!