Magdalenas de chocolate

Sin dejar de batir añadimos el azúcar en forma de lluvia. Debemos batir hasta que blanqueen y al menos dupliquen su volumen.

Tamizamos la harina, con el cacao y la levadura. Y lo añadimos a la mezcla anterior.

Removemos esta vez con una varilla manual. Lo justo para que se integre todo bien y no haya grumos.

Cubrimos con film y lo llevamos a la nevera unas dos horas. Al enfriar la masa conseguiremos un choque térmico con el calor del horno y ésto hará que nuestras magdalenas tengan un copete más alto.

Unos minutos antes, precalentamos el horno con calor de arriba y abajo a 200 grados.

Sacamos la masa de la nevera y la removemos un poco. Es momento de añadir un puñado de chips de chocolate si así lo deseamos.

Lo ideal es tener una bandeja metálica especial para magdalenas. Esto nos ayudará a que los moldes de papel mantengan su forma y no se abran en exceso por el peso del relleno. Forramos las cavidades con los moldes de papel y los rellenamos 3/4 partes. Si queréis les podéis poner encima un poco más de chips de chocolate.

Después, si las guardamos en un recipiente hermético, aguantarán tiernas varios días. Espero que os gusten!