En primer lugar debemos preparar una plancha de bizcocho. Precalienta el horno a 180°C y forra con papel de hornear una bandeja rectangular de unos 30x40 cm.

Coloca la mariposa en la jarra y pon los huevos y el azúcar. Programa 6 min/37°C/vel 3.5. Después programa otra vez 6 min/vel 3.5.

Añade la harina tamizada y la sal y programa 5 seg/vel 3. Abre la tapa y acaba de mezclar con ayuda de una espátula.

Vierte la masa en la bandeja que habías preparado. Alisa la superficie para que quede lo mas repartida e igualada posible. Introduce al horno 12 minutos.

Saca del horno y deja enfriar mientras hacemos la compota. Lava la jarra y sécala.

Pon en la jarra los frutos rojos, el azúcar y el zumo de limón. Programa 15 min/100°C/vel 1.

Vierte la compota en una fuente y deja que se enfríe. Lava y seca la jarra.

Ahora vamos a preparar la crema de mascarpone. Vuelve a colocar la mariposa en la jarra. Pon los huevos, la yema y el azúcar y programa 6 min/vel 4.

Retira la mariposa y pon la tapa sin el cubilete. Programa 2 min/vel 3 y mientras tanto incorpora por el orificio el mascarpone. Después pon el cubilete y programa 1 min/vel 3.

Corta el bizcocho en discos del tamaño que se ajuste a los vasos donde vayas a servir tu postre, con ayuda de un cortador de galletas o lo que tengas.

Pon en cada vasito un disco de bizcocho, encima un par de cucharadas de compota y sobre ésta un par de cucharadas de crema de mascarpone. Repite la operación con otra capa de bizcocho, compota y crema. Reserva los vasitos en la nevera al menos dos horas. Yo los hice la noche anterior.

En lugar de servir en vasitos puedes también preparar este postre en una bandeja como el clásico tiramisú. Para ello corta el bizcocho en dos piezas del tamaño que se ajuste a tu bandeja y monta el tiramisú alternando dos veces capas de bizcocho, compota y crema.