Las medidas que suelo usar para la mezcla de quinoa son las que pueden verse en la foto. La idea es que el ingrediente principal sea la quinoa y el arroz un acompañamiento. El arroz negro tiene además un color que tiñe el agua de un tono rojizo que tiende a oscurecer la quinoa, pero que personalmente encuentro interesante.

Como de costumbre lavo el arroz y la quinoa antes de usarlos, principalmente por reducir el arsénico presente en el arroz.

Ponemos 3 vasos de agua con especias a nuestro gusto y la lezcla de quinoa y arroz a hervir por unos 10-15 minutos a fuego medio.

Cuando queda poco suelo bajar ligeramente el fuego hasta que dejo de ver el burbujeo. Entonces lo paro y dejo reposar un rato.

Este paso es opcional. Comprando descubrimos este paté que por sus ingredientes pensé que podía utilizarse con moderación para cocinar. Tiene una proporción aproximada de 50% carne e hígado y 50% grasa. El contenido en sal es bastante reducido en comparacion a otro patés lo cual me sorpre dió bastante.

Cuando lo uso empleo poca cantidad. Aún así le confiere un punto de aroma que se hace notar sin ser pesado. Lo único es que el aroma se pierde un poco tras unos días en la nevera por el enfriado.

Siempre que hago arroz, quinoa, pasta o patata cocino de más y guardo lo que no necesito en ese momento. De esta forma siempre tengo algo rápido para hacerme de comer 😋

Lavamos las hojas de lechuga, a mi me encantan las de hoja de roble que son algo arrugadas con las puntas de un color más oscuro tirando a marrón con cierto tono morado.

Servimos el plato con todos los ingredientes y lo aliñamos a nuestro gusto. A mi me gusta usar las hojas y los canónigos de cama y poner encima la quinoa y el huevo.

Después lo troceo todo y lo mezclo bien aliñado y con un toque de pimienta extra 😉