Ponemos a precalentar el horno a 150º. Mezclamos el aceite, la ralladura y el jugo con batidor o tenedor hasta más o menos disolver el azúcar.

Agregamos la harina y el agua. Mezclamos con cuchara hasta integrar.

Amasamos de 3 a 5 minutos hasta obtener una masa quebradiza, pero que no notemos tan aceitosa.

Para los scones, hacemos bolitas del tamaño de una pelota de ping pong, las aplastamos un poco y llevamos a placa ligeramente aceitada.

Espolvoreamos con azúcar impalpable y llevamos al horno de 30 a 45 minutos, el puntito es cuando se sienten duritos por fuera pero si apretamos, ceden como si adentro estuviesen algo blandos. Al enfriar, se endurecerán un poco más.

Para las galletitas, hacemos bolitas del tamaño de una moneda de 50 centavos (aprox.), aplanamos, y también llevamos a placa aceitada y espolvoreamos azúcar impalpable. Para éstas, por ser más pequeñas, con 20 a 30 minutos de horno (o hasta alcanzar la textura expresada en el paso anterior) deberían ser suficientes c:

Una vez cocinadas, dejamos enfriar y a devorarlas. Son livianitos, y pueden hacerse con el cítrico que prefieran. En mi caso, ni llegaron al plato, he ahí las fotos directamente en la bandeja. Espero disfruten como nosotros en casa :De