En ese hueco ponemos la levadura, el azúcar y el aceite. (De levadura le puse 20 gramos porque hacía mucho frío ese día e iba a demorar muchísimo en leudar, pero con 10 o 15 gramos está bien). Lentamente le vamos agregando el agua tibia y vamos amasando. La masa tiene que quedar húmeda, esta no es una masa seca. Una vez listo, se deja leudar.

Mientras leuda, se van picando los ingredientes, se hace el huevo duro. Una vez leude, se comienza con el proceso de armado.

Aceitamos la asadera a utilizar, nos aceitamos las manos y tomamos porciones de masa, vamos estirando con las manos. Colocamos salada encima y llevamos al horno hasta que haga piso.

Luego de eso, sacamos, colocamos más salsa y ponemos los gustos que deseemos. Una vez derretida la Mozzarella está lista para deleitar.