En una olla colocar el zapallo pelado y cortado en cubos y cubrir con agua. Cocinar a fuego moderado, una vez suelte hervor cocinar por 10 minutos. Pasado este tiempo, drenar el agua y reservarla para la masa. El zapallo moler con un tenedor.
En un recipiente colocar la harina, polvos de hornear, sal, zapallo molido y la manteca derretida, unir y a medida que necesite más agua, agregamos el agua de la cocción. Amasar por 5 minutos, tiene que quedar una masa suave y blanda al enterrarle un dedo.

Dejar reposar la masa por 10 minutos.

Mientras tanto hacemos la salsa de chancaca: En una olla colocar la chancaca, jugo de una naranja y la cáscara (sin su parte blanca), la canela, clavos de olor y las dos tazas de agua, llevar a fuego moderado-bajo y mezclar hasta deshacer la chancaca (aunque igual la venden en polvo) una vez suelte hervor, si les gusta un poco más espesa la salsa agregar una cucharada de maicena disuelta en un poco de agua fría. Bajar el fuego al mínimo, tapar y cocinar 10 minutos. Retirar del fuego y reservar.

Una vez repose la masa, dividir en pequeños trozos (a mí me alcanzó la masa para 20 sopaipillas). Hacer bolitas y estirar con un uslero, dándole forma redondeada. En una olla calentar aceite a fuego moderado, una vez caliente freír las sopaipillas por ambos lados hasta que tomen color dorado. Una vez listas dejarlas en papel absorbente.

Y ya están listas para disfrutar! Recuerden dejar unas sopaipillas solo fritas para comer con lo que más gusten. Buen provecho 🤗