Cuando los chiles hayan sudado retiramos la piel y desvenamos.

Una vez rellenados reservamos y comenzaremos a trabajar con nuestra masa hojaldre, colocamos harina en la mesa y empezamos a extender un poco la masa aproximadamente de medio centímetro.

Cortamos la masa a manera de cubrir el chile, la abertura de el chile tiene que estar en sentido contrario a la unión de la masa hojaldre.

Estarán en el horno a 180º por 30 minutos o hasta que la masa haya dorado.

Para la salsa

Comenzamos poniendo en un comal los tomates, la cebolla y el chile hasta que se cocinen. El chile será el primero en estar así que cuando estén listos los retiramos y los agregamos en agua caliente para que se hidraten.

Cuando los chiles terminen de hidratarse los despepitamos.

Añadimos todos los ingredientes a la licuadora los mezclamos y pasamos esa salsa a una sartén para freírla un poco, salpimentamos y reservamos.

Podemos cortar en caso de que así sea la presentación.

Las llevaremos al horno a 180º por 20 minutos con una rama de romero para aromatizar.
O las podemos hacer en una sartén con un poco de mantequilla y el romero.

Teniendo las preparaciones podemos emplatar.