Límpia los champiñones y córtalos en láminas. Sáltealos en una sartén con un poco de aceite, un ajo picadito, sal y pimienta al gusto. (En la segunda foto, veréis champiñones cortados por la mitad...esos eran para la crema de verduras)

Deja los láminados en un plato aparte, hasta que se enfríen. (Recuerda que no se pueden poner alimentos calientes en el hojaldre). El bacon lo tenía congelado, en la foto está sobre papel de cocina para que se seque. Prepara el hojaldre y el queso

Corta la lámina de hojaldre por la mitad a lo largo, reserva la otra mitad en la nevera si no la vas a usar en ese momento. Corta en dos el que vas a utilizar (yo corté los dos para hacer cuatro, pero me arrepentí y lo guardé en la nevera). Pon una loncha de queso encima de cada trozo de hojaldre

Cubre con el bacon y encima pon queso rallado para fundir (en el que iba a ser para mí puse ciruelas encima del queso)

Pon los champiñones encima (reserva unos cuantos trozos si quieres decorar los hojaldres). Cubre con otra loncha de queso. Enrolla y cierra las puntas

Pinchar la superficie para que salga el vapor, pincela con huevo batido

Pon unos cuantos trocitos de champiñón por encima y las almendras o semillas. Hornea a 180 grados con el horno previamente calentado

Tardarán unos 20 minutos en estar horneados, dependiendo del horno. Para diferenciar el mío, le puse unas pasas de corinto encima. Retira del horno cuando estén dorados y cocido el hojaldre

A nosotros nos gusta comer el hojaldre templado, caliente quema mucho y no se saborea bien y frío pierde la textura crujiente.

Espero que os gusten