Primero, desgrasar lo más posible el peceto, y cocinarlo en abundante agua con un poco de sal gruesa y laurel por lo menos por una hora y media; a mí me llevó 2 h porque era muy grande. Cuando pase 1 h dar vuelta para que se cocine bien de los dos lados. Dejar enfriar dentro del agua.

Cuando ya esté frío, cortar en rodajitas de aproximadamente 1/2 cm de espesor.

Picar el perejil, el morrón y el ajo bien finito, y poner en un tazón con un poco de sal fina. Agregar el aceite y el vinagre y mezclar bien.

En el fondo de la fuente elegida, poner un poco de la vinagreta. Luego, rodajas de peceto, más vinagreta y más peceto, alternando hasta terminar. Volcar lo que haya sobrado de vinagreta, tratando de que toda la carne quede cubierta.

Por último, rallar los huevos y distribuir por encima de todo.

Tapar con film y llevar a la heladera hasta el otro día, idealmente, para que la carne se impregne bien con los sabores.

En la heladera se puede guardar varios días. ¡Con este peceto tan grande me libré de cocinar en más de un almuerzo! 🤭😆