Dejaremos reposando las semillas de cardo con agua durante 12 horas. Con una cuchara las sacaremos del medio líquido donde se encuentran, reservamos el agua que tendrá un color oscuro. Las machacamos en un mortero y la vamos añadiendo el agua reservada poco a poco y continuamos machacando. Le agregamos toda el agua.

Filtramos con un colador el líquido sin las semillas. En un cazo colocamos la leche, el cloruro de calcio, el agua con la esencia de las semillas de cardo. Y encenderemos el fuego, removeremos. Si entré 40°C. Y 50°C. no se cuaja "no cuajara". Por lo que necesitaremos un ácido en mi caso utilicé zumo natural de limón.

Y de un momento a otro el cuajo se hizo. Lo dejamos enfriar a temperatura ambiente durante 15 o 20 minutos.

Enfriado pondremos una tela encima de un colador y filtraremos la cuajada, al utilizar zumo de limón el cuajo no sirve para hacer queso, pero si hemos hecho requesón. El líquido de semillas de cardo no funcionó para cuajar, pero hemos dotado a la cuajada de unas propiedades medicinales impropias de la cuajada "la silimarina" ya puestos ha hacer algo distinto. En el proceso de filtrado y todavía húmeda la cuajada le añadí polvo de manzanilla de mahón y los otros dos tipos de flores, lo removi...

Después de mezclado lo prense para sacar parte de la humedad. Sin pasarme. Lo introduje en un tarro esterilizado y lo guarde en la nevera, no sin antes probarlo un poquito. Que muy dulce y suave.