Empezamos batiendo dos huevos, le añadimos perejil seco rallamos dos dientes de ajo, se puede cortar muy finito pero a mí me gusta más rallado que no te encuentras en las albóndigas ningún trozo y batimos todo.

Vamos haciendo albóndigas al tamaño que os guste y las pasamos por harina

Ponemos en la sartén sal, en el cazo agua para cocer los huevos.

Machácamos los dos dientes de ajo, perejil y cubrimos el mortero con vino blanco

Dóramos un poco las albóndigas para que no se disuelvan cuando se cuezan y ls echamos a la cacerola, ya podemos poner el agua para cocer los huevos también

Retiramos la mayoría del aceite, añadimos una cucharada de harina, separamos del fuego y removemos bien sin que se queme

Echamos la mezcla del mortero y vamos removiendo al fuego sin que se queme y sin que quede grumos

Echamos los huevos en el agua hirviendo con cuidado de no quemarnos

Añadimos la mezcla de la sartén a la cacerola, removemos y cubrimos con agua las albóndigas, lo ponemos a cocer a fuego lento y tapamos la cacerola, mientras se cuecen los huevos y las albóndigas

Podemos ir friendo las patatas, yo en este caso las he echo en cuadraditos ya que se fríen antes y para este plato me gustan más así….. cuando estén fritas y las albóndigas en su punto podemos emplatar