Pollo al horno

La noche anterior maceramos el pollo sin quitar la piel, para ello le echamos al pollo la sal al gusto las bolas de pimienta previamente machadas en el mortero dejándolas a medio grosor, un limón partido a rodajas y un vasito de vino blanco.

Al día siguiente, primero precalentamos el horno, mientras el horno coge temperatura disponemos el pollo en una fuente con la parte de la piel hacia abajo y lo metemos en el horno durante 15 minutos a 200 grados. Vamos pelando las patatinas y las mini cebollas.

Tras 15 o 20 minutos sacamos el pollo del horno, le damos la vuelta a las piezas para que quede la piel hacia arriba y así se puedan tostar, echamos las cebollas y patatas y volvemos a meter en el horno durante más o menos 40 minutos a 200 grados.

Vigila el tiempo a tu gusto ya que según tú horno puede variar, para que os hagáis idea así es como me queda a mí.