Lo primero es pelar y cortar la calabaza. Si compras los trozos de calabaza ya limpios tardarás menos por ahorrarte este paso.

Quería utilizar 500 gr de calabaza pero me quedé algo corta, así que añadí una patata pequeña pelada. Corta la calabaza y la patata a rodajas de 1 cm de grosor aproximadamente. Coloca los trozos en el recipiente para varoma. Añade el agua al vaso de la Thermomix, tapa y coloca encima el recipiente con la calabaza y 1 pizca de sal fina.

Programa 30 minutos, temperatura varoma, velocidad 1. Comprueba que la calabaza está bien tiernecita con un tenedor (con cuidado de no quemarte al destapar). Destapa y deja reposar a un lado el recipiente con la calabaza, vacía el vaso de agua de la Thermomix con cuidado. Una vez templado, pon la calabaza en el recipiente con la patata.

Tritura unos 15 segundos a velocidad 4 para que se forme un puré. Añade la harina, la yema de huevo (si no tienes una yema suelta usa un huevo entero), la almendra y la sal. Programa 40 segundos a velocidad 6. Puede que necesite un poco más de tiempo para mezclar bien todos los ingredientes.

Es un buen momento para probarlo, y aunque a mi el sabor a garbanzo de la harina de garbanzo no me resulta molesta se puede neutralizar bastante añadiendo un poco de vinagre. Yo procuro no gastar más de una cucharada sopera para estas cantidades. Enharina la tabla o superficie de la cocina sobre la que vayas a amasar y vacía el vaso de la Thermomix con ayuda de una lengüeta. La harina que he usado para la mesa es harina de arroz que es bastante fina, pero también admitiría bien maizena.

Con las manos manchadas de la misma harina que has puesto sobre la tabla haz una bola con la masa. Coge un pellizco generoso de masa y haz una bola para luego estirarla haciendo una tirita con las manos. Ruédala sobre la tabla hasta obtener un “churrito” de unos 2 centímetros de diámetro. El grosor y el corte va por gustos, a mí me gustan algo grandecitos para poder masticarlos bien. Con ayuda de un cuchillo o de una espátula los cortas en trozos pequeños.

Para suavizar las marcas del corte se pueden redondear un poco los extremos con ayuda de las manos, sin hacer mucha fuerza. Si quieres decorarlos puedes utilizar un tenedor, haciendo rodar cada ñoqui por sus dientes. Aunque hay utensilios para crear esa textura sobre el ñoqui, yo no tengo ni siento la necesidad todavía. Si quieres puedes congelar una parte de los ñoquis para tenerlos listos para la semana. aunque tendrás que acordarte de descongelarlos la noche de antes para poder sacarlos.

Pon una olla a hervir con bastante agua y una pizca grande de sal. Mete los ñoquis con ayuda de una espumadera o similar y deja que cuezan. Al principio se hundirán, y puede que hasta se corte un poco la cocción si los usas descongelados por la diferencia de temperatura. No te preocupes, sube un poco el fuego pero acuérdate de bajarlo cuando veas que vuelve a hervir para que las burbujas no "escupan" los ñoquis 😂

Sabrás que están listos cuando los veas flotar. Sácalos con ayuda de una espumadera y colócalos sobre un plato para que enfríen. Notarás que se inflan un poco tras la cocción, de modo que si cuando los cortastes te parecía que quedaron pequeños seguramente salgan de la olla con un tamaño normal. Y si como yo los cortas a un tamaño "normal" tendrás unos superñoquis 🦸‍♀️

A mi los ñoquis como me gusta hacerlos sositos me piden una buena salsa. Y de momento tengo dos recetas favoritas. Por un lado está el pesto cremoso de aguacate, que es el más fácil y rápido de hacer ya que solo tienes que triturar los ingredientes. Te vale tanto la Thermomix como una batidora de mano, aunque cuando hago estas cantidades reducidas yo tiendo más a la batidora de mano para manchar menos y triturar mejor.

Por otro lado la salsa de tomate. La clave para una buena salsa de tomate, que sea saciante y rica, es hacer un buen salteado de verdura cortada en trozos pequeños con una cucharada de aceite de oliva virgen extra y especia. Añadir un bote de tomate natural triturado cuando veas la verdura tiernecita y dejar que se cocine todo junto un par de minutos. Aguanta muy bien en la nevera en un tarro de cristal bien cerrado.

Y tu, ¿con qué te tomarías estos ñoquis, con el pesto de aguacate o la salsa de tomate? 😜