Limpiamos los Portobello con mucho cuidado con un trapo húmedo quitando restos de tierra y separando el tronco (que podemos utilizar para otra cosa).

Los cortamos en láminas no muy gruesas con una mandolina o un cuchillo fino (yo siempre utilizo el cuchillo jamonero ;) y disponemos en un plato como más nos guste sin apenas solapar uno con otro.

Para la salsa: Añadimos la mitad del zumo de 1 limón, sal, pimienta y romero al gusto.

Echamos aceite y removemos bien para que ligue, no debe quedar muy espesa mejor ligera, así que seguimos añadiendo aceite hasta que lo consigamos.

Quitamos la cáscara de los pistachos y lo que podamos de la piel.
Machacamos en mortero (o picamos en robot) hasta que casi no veamos trocitos.

Echamos la salsa por encima de los champiñones, si queda justita añadimos un chorrito de aceite. Dejamos que se tomen durante 5-10 minutos aprox a temperatura ambiente.

Decoramos con rúcula o los dejamos tal cual que quedan muy monos.😋

Espolvoreamos un poquito de queso parmesano rallado o en pequeñas lascas.