Lacón con grelos

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Santiago de Compostela

Esta es otra de las comidas estrella en las mesas gallegas. Viene a ser como un cocido a pequeña escala, por lo que las sobras también darán para hacer más comida. Que si unas croquetas, o una pizza, o empanada, o ropa vieja, o quiche, lasaña… casi da más juego aprovechar las sobras que comerse el lacón con grelos a secas. Con un buen vino tinto os puedo asegurar que no os va a desagradar nada. Además, en este caso, he incorporado la olla rápida, con lo que no nos llevará un día entero hacerlo. Espero que os guste.

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Ingredientes

2 horas
6 personas
  1. 1lacón (en este caso es de 1 kg)
  2. 4patatas
  3. 1chorizo
  4. 1 manojogrelos
  5. 1 trozounto
  6. Aceite de oliva virgen extra
  7. Pimentón picante o dulce

Paso a paso

2 horas
  1. 1

    Dejamos desalar el lacón durante 24 horas en agua fría. La cambiaremos cada 8 horas.

  2. 2

    Metemos el lacón en una olla rápida bien cubierto por agua fría. Pondremos la olla a fuego fuerte hasta que llegue a la posición 2. Dejaremos que se haga durante unos 40 minutos. Cuidado con el fuego, ya que habrá que bajarlo una vez que la válvula alcance la posición 2, sino puede haber cualquier accidente doméstico.

  3. 3

    Por lo tanto controlaremos que el fuego esté lo suficiente fuerte como para la válvula esté en el 2, pero no demasiado que haga que corramos peligro.

  4. 4

    Una vez pasados los 40 minutos tenemos que esperar a que se pueda abrir la olla sin peligro, es decir, que la válvula ya esté totalmente bajada y que no esté echando nada de vapor. Quitaremos el lacón del agua y reservamos.

  5. 5

    En el agua que queda de cocer el lacón vamos a echar las patatas y un poco de unto (como del tamaño de media nuez). Dejaremos que se cuezan durante unos diez minutos

  6. 6

    Para limpiar los grelos lo primero que hay que hacer es eliminar las hojas amarillentas. Una vez que hayamos eliminado todas las hojas amarillas, le daremos unos golpes con un mazo a los tallos de los mismos, para romperlos pero sin machacar.

  7. 7

    Podemos romper cada rama de los grelos en tres trozos. ¡PERO NUNCA EL CUCHILLO! Se retuercen y se rompen a mano

  8. 8

    Agregaremos los grelos limpios. Incorporaremos más agua si vemos que grelos hace falta. No os creáis que es ponerlos debajo del agua y listo.

  9. 9

    Para ver el punto de cocción hay que comprobar que el tallo está blando. No es necesario, en este caso, ponerle la tapa a la olla.

  10. 10

    Pues así es como se limpian los grelos. Habíamos quedado en que los agregamos a las patatas, al igual que el chorizo. Dejamos que se hagan otros 10 minutos.

  11. 11

    Una vez que están los grelos y las patatas listos, los vamos a retirar del agua y los pondremos en una fuente para servir. Seguro que echarán un poco más de agua, así que la retiraremos de la fuente.

  12. 12

    Cortamos el lacón en rodajas o bien lo servimos entero, eso al gusto.

  13. 13

    Serviremos entonces un poco de lacón, con patatas, grelos y chorizo y le echaremos un chorrito de aceite de oliva virgen extra y un poco de pimentón. Este al gusto, a mí me gusta con pimentón picante, aunque como en todo, para gustos, pimentones. Buen provecho

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Caricatura gris dibujada a mano de una cámara y una sartén con estrellas saliendo de la sartén

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Santiago de Compostela
Antes de nada os presento mi blog: http://www.lacocinademinia.es/Con esta página no pretendo sumar otra más al amplio mundo de páginas de recetas, sino que quiero ir algo más allá, a través de recuerdos, de reflexiones, trucos, consejos, gustos, etc. Al fin y al cabo, el momento de la cocina es un momento para estar con uno mismo y da lugar a pensar en infinidad de cosas.Mucha de la gente que ha pasado por mi mesa a comer me ha comentado la idea de abrir un restaurante…¡¡¡¡noooo!!! ¡Qué forma de odiar la cocina!. Al igual que me han insinuado que me presente a un concurso de cocina. Al próximo que me diga que me pesente a un concurso de cocina lo mando al Gran Hermano.Sí que es cierto que tengo dos estados diferentes en la cocina: disfrutándola- normalmente fines de semana y cuando viene gente a comer a casa-, y odiándola- cuando tengo que pensar TOOOODOS los días el menú del día siguiente-.Y cuando digo pensar, no sólo es pensar en lo que hacer de comer, sino repasar mentalmente los ingredientes que tengo en el congelador, en la nevera, en la despensa, los que tendría que comprar en caso necesario, en qué momento puedo ir a comprar, si antes o después de recoger a los niños en el cole, o entre que van a una clase o a otra,… ¡¡Lo odio!! Pero no por ello odio cocinar.Empecé este proyecto como terapia y porque, como dice mi madre, soy un “culo inquieto”. Siempre tengo que tener algo en mente y si supone un reto para mí, mejor. Como terapia, me ha servido, y con creces. Estoy teniendo mejor acogida de lo que esperaba y además, tengo a la familia encantada. Todos los días comen algo diferente. No os creáis que las fotos me las saco de internet, no. Las fotos son hechas por mí de platos cocinados por mí, lo cual me obliga a cocinar variado, aunque bien es cierto que no es muy diferente de lo que cocinaba anteriormente.
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