Magdalenas de leche condensada con pepita de chocolate

lacocinademinia.es
lacocinademinia.es @lacocinademinia
Santiago de Compostela

Esta es una de esas recetas que se pueden preparar con los niños.

Además, no hay como desayunar unas magdalenas hechas por uno mismo. No sabéis la cara de satisfacción que se le pone a mis hijos cuando lo que comen ha sido previamente hecho por ellos.

Y es que la cocina es una fuente inagotable de enseñanza. ¿Que están aprendiendo a leer? Pues les hacemos buscar el bote en el que ponga harina. ¿Que están aprendiendo a sumar?. Les pondremos por un lado unos moldes y por otro otros y les preguntamos cuántos hay en total. ¿Que están aprendiendo medidas?... bueno, os podéis imaginar para todo lo que da la cocina con los niños.

Leer más
Editar receta
Ver informe
Compartir

Ingredientes

30 minutos
6 raciones
  1. 3huevos
  2. 100 grsharina de fuerza
  3. 5 grsbicarbonato sódico
  4. 150 grsleche condensada
  5. 50 grsazúcar
  6. 50 grsmargarina
  7. 1 pizcasal
  8. 3 onzaschocolate negro

Paso a paso

30 minutos
  1. 1

    Separamos las yemas y las claras.

    Mezclamos las yemas con el bicarbonato, el azúcar y la margarina y batimos enérgicamente hasta que quede blanco y se cree una crema homogénea.

  2. 2

    Montamos las claras con una pizca de sal.

    Tienen que quedar muy bien montadas, que se hagan montañitas con las propias claras mientras las batimos.

  3. 3

    Mezclamos las dos preparaciones anteriores y les vamos echando, poco a poco y con la ayuda de un tamiz, la harina.

    Mezclamos con unas varillas con movimientos suaves y envolventes.

  4. 4

    Rellenamos los moldes de papel de las magdalenas con la preparación hasta media altura.

    Cortamos el chocolate con un cuchillo e introducimos en cada magdalena un trozo de chocolate del tamaño de una almendra.

  5. 5

    Metemos los moldes dentro de un molde metálico o de silicona de magdalenas, tal y como aparece en la foto, para evitar que pierdan la forma.

  6. 6

    Metemos en el horno precalentado a 200ºC y, a los cinco minutos, bajamos la temperatura a 180ºC.

    Dejaremos que se hagan las magdalenas hasta que cojan un tono tostado. Esto pueden ser unos 10-15 minutos.

    Tendremos que evitar abrir el horno mientras están las magdalendas, así con ponerlas en la rejilla del mismo, retirando el resto de las bandejas, para que el calor llegue por igual

  7. 7

    Una vez hechas, se retiran del horno y se dejan enfriar en una rejilla.

    Buen provecho

Reacciones

Editar receta
Ver informe
Compartir

Cooksnaps

¿Cómo te salió? Recomienda esta receta mandando tu Cooksnap

Caricatura gris dibujada a mano de una cámara y una sartén con estrellas saliendo de la sartén

Comentarios

Escrita por

lacocinademinia.es
lacocinademinia.es @lacocinademinia
Santiago de Compostela
Antes de nada os presento mi blog: http://www.lacocinademinia.es/Con esta página no pretendo sumar otra más al amplio mundo de páginas de recetas, sino que quiero ir algo más allá, a través de recuerdos, de reflexiones, trucos, consejos, gustos, etc. Al fin y al cabo, el momento de la cocina es un momento para estar con uno mismo y da lugar a pensar en infinidad de cosas.Mucha de la gente que ha pasado por mi mesa a comer me ha comentado la idea de abrir un restaurante…¡¡¡¡noooo!!! ¡Qué forma de odiar la cocina!. Al igual que me han insinuado que me presente a un concurso de cocina. Al próximo que me diga que me pesente a un concurso de cocina lo mando al Gran Hermano.Sí que es cierto que tengo dos estados diferentes en la cocina: disfrutándola- normalmente fines de semana y cuando viene gente a comer a casa-, y odiándola- cuando tengo que pensar TOOOODOS los días el menú del día siguiente-.Y cuando digo pensar, no sólo es pensar en lo que hacer de comer, sino repasar mentalmente los ingredientes que tengo en el congelador, en la nevera, en la despensa, los que tendría que comprar en caso necesario, en qué momento puedo ir a comprar, si antes o después de recoger a los niños en el cole, o entre que van a una clase o a otra,… ¡¡Lo odio!! Pero no por ello odio cocinar.Empecé este proyecto como terapia y porque, como dice mi madre, soy un “culo inquieto”. Siempre tengo que tener algo en mente y si supone un reto para mí, mejor. Como terapia, me ha servido, y con creces. Estoy teniendo mejor acogida de lo que esperaba y además, tengo a la familia encantada. Todos los días comen algo diferente. No os creáis que las fotos me las saco de internet, no. Las fotos son hechas por mí de platos cocinados por mí, lo cual me obliga a cocinar variado, aunque bien es cierto que no es muy diferente de lo que cocinaba anteriormente.
Leer más

Recetas similares