Primero, se ponen las costillas de cerdo en remojo la noche anterior y se les cambia el agua cada 8 horas para eliminar el exceso de sal. No cambiar más de 3 veces. Tienen que mantener un punto de sal.

Aunque no es necesario también se puede preparar con antelación el majado de cilantro.

Para ello, se pelan los ajos y se machacan en un mortero junto con la sal y la pizca de comino.

Cuando tenga textura de pasta, se pica el cilantro, se añade al mortero y se muele un poco con la pasta anterior. A continuación se añade el agua, vinagre y el aceite de oliva. (Opcional) Se añade la pimienta o tabasco al gusto. Se mezcla bien todo, reservar.

En este punto, el majado estaría listo, queda como una textura de vinagreta. Ahora, si prefieres una textura cremosa puedes batirlo con batidoa eléctrica durante unos minutos. Esto queda abierto a la elección personal de cada uno, en la foto aparece la versión "crema".

Seguimos con la receta. Después de haber dejado las costillas en remojo toda la noche, se pone una olla con agua al fuego y introducen las costillas partidas en trozos grandes.

Cuando el agua hierva se cuentan 10 minutos y se añade al mismo caldero donde están las costillas, las papas previamente peladas y cortadas en trozos grandes, un poco de colorante alimentario y los 2 dientes de ajo machacados. Procurar que el nivel del agua cubra las costillas y las papas.

Se añade una pizca de sal, sin pasarse, ten en cuenta que las costillas son saladas y al final del hervido siempre podremos ajustar la sal.

Cuando falten 10 minutos para que las papas terminen de cocer se añaden las piñas de millo (mazocas de maíz) a la olla y hervir hasta que las papas terminen de cocerse.

Se apaga el fuego y se deja reposar unos 15 min.

En el momento de emplatar se sirven las costillas, papas y la mazorca de maíz. Se riega con el majado de cilantro por encima al gusto. Que les aproveche!