Cheesecake con gelatina de fresas

En un recipiente ponemos las hojas de gelatina a hidratar en agua fría.

Trituramos la galleta y la mezclamos en un bol con la harina de almendra.

Derretimos la mantequilla y la unimos a la galleta y amasamos hasta que quede una masa firme.

Cubrimos el fondo del molde con papel vegetal y ajustamos. Rellenamos el fondo con la masa de galleta presionando hasta que quede una base fina y compacta, metemos en el congelador.

En un cazo, mezclamos el azúcar, las yemas, el agua y el zumo de limón. Lo ponemos a fuego suave removiendo hasta que hierva,(ojo no haga grumos). Reservamos la crema obtenida en un bol y añadimos la gelatina escurrida, mezclar bien y luego incorporar el queso.

Trabajar la mezcla hasta conseguir una textura homogénea.

Semimontar la nata con 60 gr. de azúcar glass

Con movimientos envolventes incorporar la nata a la crema de queso, mezclar bien con delicadeza.

Sacar la galleta del congelador, rellenar el molde con la mezcla y guardar de nuevo en el congelador.

En un cazo calentamos la mermelada de fresas, con los 50ml. de agua, retiramos del fuego y añadimos la gelatina hidratada. Mezclamos bien y dejamos templar.

Sacamos el molde del congelador si la superficie ya ha cuajado, echamos la gelatina de fresas por encima uniformemente.

Meter en la nevera un par de horas. Desmoldar con cuidado y servir. Que aproveche.