Ensaimadas caseras de mantequilla

Preparamos la masa madre:
La noche anterior que hagamos las ensaimadas prepararemos la masa madre.
Pondremos en un bol el agua que estará templada, desmenuzamos la levadura y removemos con el agua, echamos la harina lo mezclamos todo y hacemos una bola, lo tapamos con film y lo dejamos a temperatura ambiente toda la noche.

Preparamos la masa de las ensaimadas:

En el vaso de la amasadora echamos por este orden el agua, el azúcar, los huevos, la mantequilla, la masa madre, la harina de fuerza y la sal. También lo podéis amasar a mano.

Amasamos con el gancho unos 5 minutos y ahora vamos a echar, sin dejar de amasar, las 2 cucharadas de aceite en la masa y seguiremos amasando otros 15 minutos más, hasta tener una masa elástica y fina.

Dejamos reposar unos 20-30 minutos.

Ponemos la masa en la encimera, si hiciera falta y se pega, pondremos un poco de aceite.

Desgasificamos la masa, dándole palmadas sobre la encimera y hacemos una bola.

Estiramos las bolas una a una, con un rodillo, las untamos con mantequilla y la terminamos de estirar con las manos hasta tener una masa casi traslucida.

Enrollamos la masa y hacemos cilindros, los dejamos reposar 20 minutos.

Enrollamos de nuevo todo lo que podamos la masa, para hacer más grandes los cilindros y hacemos círculos, haciendo la forma de las ensaimadas.
Dejamos reposar 2 horas.

Precalentamos el horno a 200º C.

Pincelamos las ensaimadas con leche y horneamos unos 9 minutos.

Dejamos enfriar en una rejilla y espolvoreamos con azúcar glass.