Tortas fritas para los días de lluvia

Esta receta pude recordarla gracias a dos alumnos del colegio donde trabajo, en la ciudad de Campana.
A uno no le gustaban los días de lluvia, por lo que intenté compartirle algún motivo para que empezaran a gustarles... El otro llegó hace muy poquito de Rusia y con su docente tratamos de integrarlo a nuestra cultura, compartiendo de a poco palabras y costumbres bien nuestras.
Así fue como, a partir de estos niños, resurgió un recuerdo grabado en mi corazón de mi abuelo paterno, mi “Nono”...
Él me enseñó a elaborarlas con lo que teníamos en casa: una tacita de harina leudante, otra de cuatro cero, un poquito de agua, aceite, azúcar y sal.
¡Nunca olvidaré la receta y aquel día de lluvia en que cocinamos juntos mis primeras tortas fritas!
Laura, de Campana.