Lavar y desinfectar muy bien los tomates, cortar los extremos y hacer un pequeño corte al costado de cada uno, para que facilite quitar la cáscara. Poner a calentar una taza de agua y colocar los tomates, contar 6-7 min a partir de que comiencen a hervir y apagar.

Sacarlos del agua y retirarles la cáscara, procesarlos en la licuadora por un par de minutos, luego pasar por el colador para retirar las semillas.

Calentar el aceite, añadir la salsa, el orégano seco, añadir el azúcar y sal al gusto hasta obtener el dulzor-acidez deseado y cocinar a fuego muy bajo por unos 20-25 min, removiendo ocasionalmente para que no se queme, la salsa deberá reducir y espesar, cuando falten 5 min para apagar, agregar la hoja de albahaca. Retirar del fuego, colocar en un recipiente limpio y seco, decorar con albahaca. La salsa rindió para 3 pizzas 🍅