Galletas de avena, plátano y canela sin harina ni azúcar

Ptega
Ptega @ptega
Santander

Vamos con una receta de galletas sencilla con sólo 4 ingredientes, muy ricas y sanas.

Leer más
Editar receta
Ver informe
Compartir

Ingredientes

25 minutos.
11-12 unidades
  1. 75 gcopos de avena
  2. 30 gharina de almendra
  3. 2plátanos muy maduros
  4. 1 cucharaditacanela en polvo

Paso a paso

25 minutos.
  1. 1

    Empezamos agrupando todos los ingredientes. Como podéis ver en la foto mis plátanos estaban bastante maduros, así no hay que agregar nada de azúcar porque ya aportan bastante dulzor. Ponemos a precalentar el horno con calor arriba y abajo a 180 grados y forramos una bandeja apta para horno con papel sulfurizado.

  2. 2

    Aplastamos los plátanos con ayuda de un tenedor hasta obtener una especie de puré, si os cuesta aplastarlos, los triturais con la batidora. Echamos nuestro puré de plátano y la harina de almendra en un bol y mezclamos bien hasta que se integre todo.

  3. 3

    Agregamos la canela y volvemos a mezclar. Incorporamos los copos de avena y mezclamos de nuevo hasta que se integre todo.

  4. 4

    Vamos cogiendo con la mano pequeñas porciones de la masa, las colocamos en la bandeja y aplastamos con la mano hasta dejarlas muy finas. Llevamos nuestra bandeja al horno y dejamos que se doren, entre 15-20 minutos. Sacamos nuestra bandeja del horno y dejamos que las galletas templen.

  5. 5

    Una vez que podamos coger las galletas sin quemarnos, las pasamos a una rejilla para que terminen de enfriar.

  6. 6

    Ya tenemos nuestras galletas listas, veréis como os sorprenden por su textura y sabor. Aguantan 4 días si las guardamos en un recipiente hermético, en casa duraron un suspiro porque eran poquitas y gustaron mucho.

Reacciones

Editar receta
Ver informe
Compartir

Comentarios

Escrita por

Ptega
Ptega @ptega
Santander
He de confesar, que nunca me había gustado la cocina, es más de chiquitilla solía huir de ella y casi lloraba cuando los Reyes me traían una cocinita. Es más hasta que me casé sólo entraba en la cocina por necesidad, por pura subsistencia, había que comer y de platos precocinados y carnes o pescados a la plancha no pasaba.Tras casarme, empecé a curiosear por Internet y a intentar elaborar las recetas que encontraba, a veces con más acierto y otras con menos y en ese tiempo descubrí que la cocina me relaja, que me gusta probar cosas nuevas, aunque a veces con las prisas acabamos con el sota, caballo y rey.Ahora os cuento un poquito de mi, soy, como dice una amiga, una viejoven. Me gusta pasar el tiempo con la gente que quiero, ansío cada año que llegue el 15 de mayo para volver al pueblo de mi infancia y reencontrarme con esos amigos que no necesitas ver a menudo para saber que han sido, son y serán las personas que con un gesto borran todas las tristezas.
Leer más

Recetas similares