Costillas a la miel al horno

Precalentamos el horno a 220 grados por arriba y por abajo

En la bandeja del horno colocamos un papel vegetal. OS aconsejo este papel porque aunque toda la vida nuestras madres han puesto un poco de papel albal, a día de hoy se ha descubierto que este papel al calentarlo a tanta temperatura resulta toxico.

Colocamos en el papel las costillas, podemos usar las costillas en una pieza o cortada en trocitos, solo varia un poco el tiempo que necesita en el horno. Salpimentamos al gusto y la cubrimos de aceite, podemos ayudarnos con un pincel de cocina si tenemos. Metemos al horno.

Vamos vigilando y a los 5-10 minutos cuando la carne este grisácea le damos la vuelta para que se haga por abajo. Lo dejamos otros 5 minutos y le volvemos a dar la vuelta

Lo dejamos 5 minutos y cuando la carne este un piloto tostadita (no demasiado, sino se queda muy seca) y le añadimos con una cuchara sopera la miel al gusto por encima. Ahora mucho ojo que no se nos queme la miel. La dejaremos unos dos minutos, la miel se deshara y con la misma cuchara cogemos la miel que queda en la bandeja y la echamos sobre la carne, lo dejamos un minuto y repetimos este último paso, si vemos que la miel aún lo permite sin quemarse volvemos a repetir este paso.

Si la miel ya empieza a tener un color muy oscuro no repetiremos el paso. Apagamos y servimos y listo!!