Hacemos un majado con un diente de ajo, las hierbas y el pimentón y añadimos tres cucharadas de aceite

Levantamos la piel del pollo e introducimos el majado por el interior y lo masajeamos un poco para que penetre bien por todos lados. Lo dejamos macerar durante al menos 2 horas y si lo hacemos de un día para otro, mejor.

Precalentamos el horno a 220 ° y mientras cortamos las patatas con 1 cm. de grosor aproximadamente, la cebolla y el pimiento en juliana, el tomate y el calabacín en cubitos de 2 cm. aproximadamente. En la bandeja del horno echamos un poco de aceite para engrasar y repartimos lo cortado que salpimentamos,

Colocamos encima el pollo y al horno. Mientras hacemos un caldo con el vaso de agua y de vino, dos dientes de ajo picados, unos cuantos granos de pimienta y una hoja de laurel y el cubito de caldo. Llevamos a ebullición hasta que el alcohol se haya evaporado y vamos mojando cada 15 minutos con un cazo el pollo.