Pelamos las cebollas y troceamos.

En la olla rápida echamos un buen chorreón de aceite de oliva, las cebollas y un poco de sal, y cuando empiecen a dorarse, añadimos el vino, las pastillas de caldo concentrado, hervimos un minuto y trituramos.

Mientras se hacen las cebollas, quitamos las pieles y las asaduritas a los traseros y lavamos.

Guardamos los traseros de uno en uno, a dos, a tres, como os convenga, en recipientes de plástico, echamos por encima la salsa, tapamos y al congelador.

Es una forma práctica de hacer de comer, ahorrando tiempo y dinero, para acompañar solo tienes que preparar después, unas patatas fritas, un salteado de verduras, un puré, pasta o una ensalada o con lo que más os guste porque hay muchas opciones y así el plato principal ya lo tenéis hecho.

Estos ingredientes son para 8 porciones y el tiempo de preparación es de 25 minutos.

Esta receta es muy fácil de preparar, ahorrando energía y tiempo y además está delicioso siempre y con pocos ingredientes.