Para el bizcocho, forra con papel de horno una bandeja de 30x40 cm y precalienta el horno a 180°C con calor de arriba y abajo.

Pon la mariposa en el vaso e introduce los huevos, el azúcar y la esencia de vainilla. Programa 6 min/37°C/vel 4. Luego programa de nuevo 6 min/ sin temperatura/vel 4.

Añade la sal y la harina y mezcla 4 seg/vel 3. Retira la mariposa y acaba de mezclar con la espátula.

Vierte la mezcla en la bandeja preparada y alisa la superficie procurando que la masa cubra toda la bandeja y tenga el mismo grosor.

Hornea unos 12 minutos. Mientras tanto, estira sobre la encimera un paño limpio y espolvorea con azúcar.

Cuando el bizcocho esté hecho desmóldalo sobre el paño, de manera que el papel quede arriba. En caliente retira el papel con cuidado de no romper el bizcocho. Inmediatamente enrollarlo y deja que se enfríe así.

Mientras prepara el relleno. Coloca la mariposa y pon en el vaso el queso crema y la nata bien fríos. Añade también el azúcar glas. Programa vel 3.5 sin tiempo y ve controlando la consistencia hasta que esté la crema montada. Reserva en la nevera hasta que rellenes el bizcocho.

Una vez frío el bizcocho, lo desenrollas y extiendes una fina capa de mermelada por toda la superficie. Luego extiendes encima una capa de la crema de queso.

Enrolla con cuidado, presionando ligeramente y procurando que el cierre quede en la parte de abajo.

Envuelve el rollo en papel de hornear y llévalo a la nevera, al menos 4 horas.

Antes de servir corta los dos extremos del bracito (no los tires, que aunque esos cortes no sean tan bonitos, están igual de ricos). Decora a tu gusto la superficie. En mi caso puse crema del relleno en una manga pastelera con boquilla rizada y decoré la parte de arriba con ella y fruta fresca. Otra opción rs espolvorear con azúcar glas, pero en este caso, hazlo en el momento de servir.