Gelatina de uvas de la suerte

lacocinademinia.es
lacocinademinia.es @lacocinademinia
Santiago de Compostela

Cuando pensamos en comidas navideñas nos vemos a todos los miembros de la familia o amigos sentados a la mesa, comiendo, hablando, a veces cantando,…

Pero no para todo el mundo esto es tan sencillo. Por desgracia, y con esto no quiero amargar a nadie, sino dar una solución, hay muchas enfermedades que impiden que alguna gente pueda comer como los demás.

Y en este caso no me refiero a alergias, sino a dificultades para poder tragar o masticar.

Ese es el caso de mi padre, del que ya os he hablado en alguna ocasión.

Tiene una enfermedad degenerativa, Corea de Huntington, que es una mezcla de ELA, párkinson y alzheimer, y que provoca, entre otras cosas, dificultades para poder comer correctamente.

Pero no por ello tiene menos derecho que los demás a disfrutar las navidades. Y si algo caracteriza nuestras navidades son las uvas de la suerte. Imaginaos una persona que se está atragantando seguido mientras come intentando tomarse las uvas. Imposible.

Así que ideé esta receta para que pueda compartir con nosotros este momento.

Y si es útil para otra gente, mejor que mejor. A veces lo más complicado se soluciona con algo muy sencillo, y en este caso os puedo decir que es bien fácil hacer. Está al alcance de cualquiera.

Y, por cierto, también va por Ruth Blanco, la presidenta de la Asociación Española de Corea de Huntington, que en su día me pidió que adaptara alguna receta.

Leer más
Editar receta
Ver informe
Compartir

Ingredientes

  1. 400 grsuvas (mejor las que vienen ya sin pepitas)
  2. 1 cucharadaazúcar
  3. 2 sobresgelatina
  4. Agua

Paso a paso

  1. 1

    Batimos muy bien las uvas y las colamos para eliminar las pieles y las impurezas. Es fundamental que vaya muy líquido.

  2. 2

    Agregamos el azúcar y hervimos durante un par de minutos.

  3. 3

    En un vaso con un poco de agua diluimos uno de los sobres de gelatina y se la mezclamos a la preparación anterior. Dejaremos que enfríe una hora.

  4. 4

    Batimos de nuevo, pero esta vez con la batidora de varillas. Calentamos un vaso de agua y diluimos el otro sobre de gelatina en él. Agregamos a la preparación anterior y batimos de nuevo con las varillas.

  5. 5

    Repartimos en moldes de cubitos de hielo, aunque no tiene que ser al completo, pues el tamaño del cubito es muy grande, y metemos en la nevera para que enfríe.

  6. 6

    En un par de horas ya tenemos nuestras uvas de la suerte listas para quien las necesite. Buen provecho y feliz año nuevo

Reacciones

Editar receta
Ver informe
Compartir

Cooksnaps

¿Cómo te salió? Recomienda esta receta mandando tu Cooksnap

Caricatura gris dibujada a mano de una cámara y una sartén con estrellas saliendo de la sartén

Comentarios

Escrita por

lacocinademinia.es
lacocinademinia.es @lacocinademinia
Santiago de Compostela
Antes de nada os presento mi blog: http://www.lacocinademinia.es/Con esta página no pretendo sumar otra más al amplio mundo de páginas de recetas, sino que quiero ir algo más allá, a través de recuerdos, de reflexiones, trucos, consejos, gustos, etc. Al fin y al cabo, el momento de la cocina es un momento para estar con uno mismo y da lugar a pensar en infinidad de cosas.Mucha de la gente que ha pasado por mi mesa a comer me ha comentado la idea de abrir un restaurante…¡¡¡¡noooo!!! ¡Qué forma de odiar la cocina!. Al igual que me han insinuado que me presente a un concurso de cocina. Al próximo que me diga que me pesente a un concurso de cocina lo mando al Gran Hermano.Sí que es cierto que tengo dos estados diferentes en la cocina: disfrutándola- normalmente fines de semana y cuando viene gente a comer a casa-, y odiándola- cuando tengo que pensar TOOOODOS los días el menú del día siguiente-.Y cuando digo pensar, no sólo es pensar en lo que hacer de comer, sino repasar mentalmente los ingredientes que tengo en el congelador, en la nevera, en la despensa, los que tendría que comprar en caso necesario, en qué momento puedo ir a comprar, si antes o después de recoger a los niños en el cole, o entre que van a una clase o a otra,… ¡¡Lo odio!! Pero no por ello odio cocinar.Empecé este proyecto como terapia y porque, como dice mi madre, soy un “culo inquieto”. Siempre tengo que tener algo en mente y si supone un reto para mí, mejor. Como terapia, me ha servido, y con creces. Estoy teniendo mejor acogida de lo que esperaba y además, tengo a la familia encantada. Todos los días comen algo diferente. No os creáis que las fotos me las saco de internet, no. Las fotos son hechas por mí de platos cocinados por mí, lo cual me obliga a cocinar variado, aunque bien es cierto que no es muy diferente de lo que cocinaba anteriormente.
Leer más

Recetas similares