Calentamos el horno a 180º. Cortamos las berenjenas por la mitad y les hacemos un corte profundo en su carne sin dañar la piel. Ponemos las cuatro partes en una fuente, las salamos un poco y un chorrito de aceite por encima. Las metemos en el horno durante 30 min.

Picamos la cebolla y la freímos con aceite, cuando empiece a estar dorada le añadimos la carne y la vamos desmenuzando con una cuchara de madera, añadimos la sal y la dejamos que vaya friendo hasta que empiece a tener color o veamos que ya no está cruda.

Si ya hace 30 min, sacamos las berenjenas del horno, y con mucho cuidado les sacamos la carne, con una cuchara o cuchillo lo que mejor nos vaya, vigilando de no romper la piel. Picamos la carne de la berenjena y la añadimos a la sartén con los otros ingredientes y lo dejamos freír alrededor de 5 minutos.

Añadimos el tomate y lo dejamos 5-10 min y apagamos el fuego y comprobamos que esté bien de sal. Hay gente que al usar tomate natural le echa un poco de azúcar para reducir la acidez del tomate, eso al gusto de cada uno/a.

Preparamos la bechamel (al final de la receta explicare como se hace para la gente que no sepa)

Rellenamos las berenjenas con el sofrito, repartimos la bechamel por las cuatro partes y espolvoreamos un poco que queso rallado.

Metemos nuevamente en el horno y lo dejamos unos 10 min, cuando veamos que faltan 4 minutos ponemos el programa de gratinar.

Y servir!

Preparación de la bechamel:

Ponemos en un cazo leche, harina, mantequilla y sal. Las proporciones de leche y harina son las siguientes: 1/2 litro de leche ponemos 2 cucharadas de sopa colmadas de harina. 1/4 litro de leche ponemos 1 cucharada de sopa colmada

Y vamos removiendo a fuego medio-lento hasta que empiece a hervir, si vemos que aun no hemos logrado la espesura o textura deseados, apartamos del fuego, removemos un poco y volvemos a ponerlo.

Tenemos que hacer desaparecer los grumos, tiene que quedar homogéneo.