Lo primero que haremos será preparar la maceración de los frutos secos, los cortamos en trozos pequeños y los pasamos a un recipiente sin que lleguen arriba, pues debemos cubrir con el vino, si lo preferimos podemos hacerlo con brandy, pero habrá que añadirle azúcar para que se caramelice, cubrimos con el vino dulce, debemos dejarlos macerando más o menos unas dos horas.

Será el momento de rellenar los solomillos (debemos pedirle al carnicero que nos los abra en tres partes, seguramente si le decimos que es para rellenar ya sabrá como hacerlo, si lo hacemos nosotros es fácil se abre por la mitad dejando una parte más ancha y esta la volvemos a abrir y machacamos la carne para que no nos quede gruesa, una vez preparada la untamos toda con el mousse de pato, seguimos con las tiras de bacon y salpimentamos.

Ponemos una cazuela al fuego y echamos la mantequilla, dejamos que se funda y quede líquida entonces añadimos la carne a fuego fuerte para que se dore por el exterior, una vez dorada la sacamos y dejamos que escurra, ese jugo lo volveremos a echar en la cazuela.

Aprovechando el jugo que ha dejado la carne echamos la cebolla y dejamos que se poche, cuándo lleve unos 5 minutos agregamos los frutos secos junto con el vino de la maceración y dejamos que evapore el alcohol unos 10 minutos a fuego vivo.

Como tenemos las patatas reservadas será el momento de chafar para hacer el puré, cuanto más mejor, si tenemos pasapurés lo usamos, añadimos sal y un buen chorro de aceite nos ayudará en la tarea de chafar, por último agregamos la nata, la usamos porque así queda más fino el puré, removemos hasta tenerlo listo, si hemos de corregir de sal, adelante.