Sazone el cordero con sal marina y pimienta recién molida. En una bolsa grande, combine las especias y agregue las espigas. Frote la carne con la mezcla de especias y reserve a temperatura ambiente durante aproximadamente una hora.

Deje 1 cucharada de aceite en una cazuela y cocine la cebolla a fuego medio durante 8 a 10 minutos, o hasta que se suavice y se dore ligeramente. Agregue las hojas de laurel, el tomillo, las ciruelas pasas y agregue la mezcla de azafrán. Regrese la carne de cordero a la sartén, agregue el caldo y lleve suavemente a ebullición. Retire del fuego, cubra y cocine en el horno durante 1 ½ horas o hasta que la carne se caiga del hueso.

Una vez que la carne esté cocida, retire y déjela a un lado para mantener el calor. Sirva la carne de cordero sobre el arroz o como usted prefiera, rociadas con salsa y adornadas con menta y perejil extra, si lo desea.