Enmantecar y en enharinar el molde y llevar a la heladera (un viejo truco para que no se pegue nada). Precalentar el horno.

Trocear el chocolate para taza. Dejar pedazos grandes. En caso de que sean chips ignorar este paso.

En un bowl mezclar manteca y azúcar hasta que quede una crema

Agregar esencia de vainilla y huevos de a uno revolviendo bien

Agregar polvo Royal y harina y mezclar. Agregar leche según sea necesario, la textura de la masa debe ser fluida pero no líquida, con un chorrito o dos suele alcanzar. Una masa líquida hará que el chocolate se hunda. Una masa muy sólida hará que quede menos esponjoso.

Finalmente incorporar bien los chips o trozos de chocolate. Es importante que parezca que hay muchos, la masa crece en el horno y hay menos de lo que parece. Volcar en la asadera y llevar al horno durante 17' aproximadamente. Para ver si está listo, hundir un cuchillo y esperar que salga limpio (ojo, si sale chocolate debes pinchar en otro lado).

Una vez listo dejar enfriar unos momentos y desmoldar con ayuda de un cuchillo.

Mezclar los ingredientes del glaseado. La mezcla debe quedar tirando a espesa. Escparcir por arriba del budín una vez enfriado y desmoldado y dejar secar unos minutos.