Blanqueamos la mantequilla con el azúcar glass con la batidora o robot de cocina, agregamos el huevo y la sal, y continuamos mezclando hasta que se haya incorporado el huevo.

Añadimos la harina y batimos hasta obtener una masa homogénea.Formamos una bola, la ponemos dentro de un cuenco, cubrimos con papel film y la refrigeramos mínimo 8 horas, yo la dejo hasta el día siguiente.

Calentamos el horno a 180º C. y preparamos una bandeja de horno cubierta con papel cebolla.Estiramos la masa con un rodillo hasta tener un grosor de tres milímetros aproximadamente y cortamos las galletas con un cortapastas.

Les hacemos orificios con una brocheta, mezclamos la yema de huevo con el agua y la pizca de sal, y las pincelamos. Horneamos durante ocho o diez minutos, o hasta que estén doradas.

Las retiramos del horno, dejamos que templen 15 minutos y las pasamos con cuidado a una rejilla para que se enfríen.

Para hacer el relleno echamos el chocolate con leche troceado en un cuenco, añadimos la nata caliente (no más de 80º C.) y la vainilla. Dejamos reposar unos 10 minutos y mezclamos hasta formar una ganache. Dejamos enfriar, pero sin que llegue a ponerse sólida completamente.

Ponemos el relleno en una manga y añadimos a la mitad de las galletas, y tapamos con las galletas restantes.Conservar en una lata, duran varios días, a mi solo me duro un suspiro jajajaja, tevasapuntar.