Lavamos y vaciamos los champiñones, es mucho mejor que sean bastante grandes para poder rellenarlos bien. Nos ayudaremos con una cuchara para el vaciado, así corremos menos riesgo de romper el champiñón. OJO¡ no tirar la carne que sacamos al vaciar ni el rabillo del champiñón, los usaremos para el relleno

Una vez este todo bien frito añadimos el tomate frito. OJO¡ no ha de quedar una salsa, el tomate solo tiene que hacer que la mezcla este jugosa para que al meterla en el horno no se quede la mezcla seca. freímos unos 3 minutitos

Ponemos los champiñones vacíos en una bandeja de horno sobre papel vegetal. Echamos en el interior de cada uno un par de gotitas de aceite y los huntamos bien por dentro y añadimos un poco de sal, esto lo hacemos para que se frían bien por dentro y para que la sal se agarre al champiñón y este no quede soso. Ojo de nuevo, no echar demasiado aceite sino se puede encharcar y partir.

Rellenamos el champiñón y lo metemos al horno durante unos 15 minutos, esto es relativo, dependera del horno y del tamaño del champiñón, yo lo que he hecho es ir pinchando con un cuchillo para comprobar que este bien cocinado

Una vez estén hechos, añadimos queso rallado por encima y subimos la bandeja para que el queso se gratine y listo¡¡ QUE APROVECHE¡¡