Batir en un bol la mantequilla y el azúcar hasta obtener una crema clara. Añadir el huevo, la esencia de vainilla y batir. Incorporar la harina e integrarla al resto de ingredientes batiendo bien.

Con las manos unir la masa sin amasar. Dividir la masa en tres o cuatro porciones, poner cada una sobre un rectángulo de papel vegetal, aplastarlas un poco y envolverlas. Guardarlas en la nevera todo el un día. El frío de la nevera la dejará firme y será más fácil trabajarla.

Retirar las porciones de masa de la nevera de a una a medida que se las va a trabajar. Cortar las galletitas con un molde redondo y colocarlas en una asadera con papel vegetal.

Mientras tanto preparar el glaseado batiendo en un bol el azúcar y la clara de huevo. Reservar un poco de glaseado blanco y al resto dividirlo y ponerlo en dos compoteras o recipientes parecidos. Al glaseado de una de las compoteras teñirlo de color rojo y al otro teñirlo de color verde. Ponerlos en diferentes mangas pasteleras.

Con el glaseado rojo dibujar arbolitos navideños sobre cada galletita y adornarlos con grajeas doradas antes que se sequen. Emplear una tercera parte de las galletitas para pintarles este color de árboles.

Dejar secar los arbolitos y a disfrutar de estas ricas galletitas!