Solomillo a la mostaza y miel con tartar de patata y verduras

Poner agua a calentar en una cazuela y, cuando comience a hervir, echar un poco de sal y las patatas cortadas a cantones. Cocer hasta que estén hechas (dependerá del grosor de las patatas).

Salpimentar el solomillo.

En un cuenco, mezclar a partes iguales mostaza y miel, mezclar hasta conseguir una masa homogénea y embadurnar el solomillo por todas partes con ayuda de una brocha de cocina.

Poner el solomillo en una bandeja de horno untada con aceite de oliva y echarle por encima el zumo de media naranja escurrida a mano directamente sobre él.

Hornear en horno precalentado a 200° entre 20 minutos y media hora, dependiendo de vuestro horno (nunca más de media hora porque se resercaría la carne)

A los 10 minutos de meter al horno, sacar el solomillo, volver a embadurnarlo de la mezcla de mostaza y miel por los dos lados, darle la vuelta y añadirle la otra media naranja escurrida.

Dejar hornear los 10 minutos restantes.

Para hacer las verduras, sólo hay que picarlas todas muy pequeñas, comenzar rehogando la cebolla y el ajo. Antes de que empiece a dorarse, añadir la zanahoria y el calabacín y terminar de rehogar.

Escurrir el aceite de las verduras y reservarlo.

Para emplatar, chafar las patatas con el aceite reservado de rehogar las verduras y, con ayuda de una cuchar, ir poniendo puré en un molde redondo alto (bien apretada para que se quede en pie al quitar el molde).

Poner encima de cada tartar de patata un poco de verdura.

Cortar el solomillo en trozos y poner cada trozo en el mismo plato que nuestro tartar.

El último paso es disfrutar, no sólo de la vista, sino también de su sabor ☺️

Nota: Si veis que se va quedando seco, podéis sacarlo del horno cada 5 minutos en vez de cada 10 e ir embadurnándolo más a menudo.