En primer lugar lavaremos bien la fruta (reservaremos un par de trocitos de cada fruta para luego), la pelaremos y haremos a trocitos pequeños para que sea más fácil triturar. Volcamos los trozos en el vaso de la batidora, añadimos la leche, la cucharadita de canela y el coco rallado. Batimos bien durante 4-5 minutos, nos quedará como una compota.

Una vez tenemos la fruta triturada, la volcaremos en un cazo, añadiremos el Agar Agar y nada más añadirlo empezamos a mover con una cuchara, SIN PARAR de mover llevamos a ebullición (añadimos el Agar Agar con una mano y con la otra ya estamos moviendo, encendemos la cocina a fuego medio y movemos y cocinamos durante 5 minutos justos). Debemos tener cuidado ya que al llevar a ebullición y ser una mezcla espesa "escupe" pequeñas gotas y... creedme... quema mucho 😓.

Pasados los 5 minutos, apagamos el fuego, dejamos reposar y mientras cortaremos a cuadraditos muy pequeños los trozos de fruta reservados al principio, los colacamos en un bol y añadimos la cucharadita de miel, movemos para que se impregnen todos y metemos al microondas durante 2 minutos tapado con film o con un plato. Sacamos del microondas y dejamos enfriar.

Una vez atemperada la mezcla, la repartimos en pequeños tarritos o vasos (o lo que tengáis por casa) y decoramos con los daditos de fruta, espolvoreamos un poco de canela y coco rallado por encima y listo!!!!

Aquí tenemos un postre súper sano y fresquito que podemos tomar en cualquier momento del día. 😋🥄🍮