Lo primero que haremos será meter nuestras calabazas al horno, lavamos muy bien las calabazas, las metemos en papel de aluminio como si estuviésemos haciendo un papillote, con un chorro de aceite de oliva y a cocinarlas calor arriba y abajo con ventilador si tenéis en vuestro horno a unos 200 grados más o menos, 40 min o hasta que veáis que están blanditas.

Mientras se hacen las calabazas, hacemos el relleno. En una sartén con aceite de oliva en la base, ponemos la cebolla, el calabacín y la berenjena muy pequeñito cortado todo, pochamos y añadimos la carne, si queréis poner alguna especia podéis hacerlo ahora, sal y pimienta.

Cuando esté la carne cocinada, añadimos el tomate triturado, yo lo hice con la batidora, sofreír y añadir el vino, dejamos cocinar a fuego lento, mientras se termina de hacer la calabaza.

Cuando ya tengamos todo, sacamos las calabazas del horno, abrimos a la mitad y vaciamos con la ayuda de una cuchara, nos deshacemos de las pepitas ya que no las vamos a usar aquí, pero podéis guardarlas y usar en otras recetas. Con cuidado de no romper la cáscara, añadimos la mitad de las calabazas en el relleno anterior y la otra mitad la guardáis y podéis hacer otras recetas con ella.

Añadimos un poco de bechamel en la mezcla de la carne y la calabaza, nos disponemos a rellenar las calabazas, cubrimos con un poco más de bechamel, el queso azul y el emmental, gratinamos y listo ! Una receta que no se tarda nada en preparar pero merece la pena probar ! 😋👩🏻‍🍳🍁