💜 Croquetas de jamón sin lactosa

Empezamos con la bechamel. A fuego medio-bajo deshacemos la mantequilla. Yo uso una cacerola pequeña porque no tenía mucho jamón y así no se estropea el teflón de la sartén con las varillas. A continuación añadimos la harina y mezclamos bien y dejamos que se tueste, sin dejar de remover para que no se queme. A continuación añadimos la leche. Bajamos el fuego si es preciso. Damos vueltas hasta que vaya tomando la consistencia deseada.

Una vez tenga el cuerpo que queramos (ni muy líquida ni muy mazacote), dejamos de batir. Si veis que está muy espesa podéis añadir un poco más de leche. Es preferible que quede más espesa y rectificar de leche a que quede muy líquida, porque eso no tiene solución (si añadimos harina, sabrá a harina cruda y no se disuelve bien). Seguimos con el jamón. Como era una punta cocida la deshilaché y la hice un poco en la sartén. Prefiero los tacos, pero era complicado. Juntamos con la bechamel.

Mezclamos bien y probamos. En este punto pruebo de sal, ya que el jamón es salado de por sí. Rectificamos al gusto y mezclamos. También añadimos aquí la nuez moscada y mezclamos. Ponemos la masa en un plato y dejamos enfriar bien en la fresquera, terraza cubierta o nevera (como es mi caso jeje).

En una sartén ponemos aceite a calentar a fuego medio. Es importante no ponerlo muy fuerte para que no revienten. Mejor ir despacio y tardar un poco más a que salten y se quemen por las prisas. Dorarlas bien y presentar. ¡Bon appétit!