Guiso de pollo con berenjena y boniato

Ptega
Ptega @ptega
Santander

Este año el otoño está teniendo un toque muy veraniego, pero aún así algunos días apetece un plato caliente. Es una receta muy sencilla, que se puede preparar la víspera y no pierde ni sabor ni textura.

Leer más
Editar receta
Ver informe
Compartir

Ingredientes

1 h 30 min
2-3 raciones
  1. 1pechuga de pollo
  2. 1berenjena
  3. 1boniato
  4. 1cebolla
  5. 200 gsalsa de tomate
  6. 1 cucharaditaajo en polvo
  7. 1 pastillacaldo de pollo
  8. Sal y pimienta negra
  9. Aceite de oliva virgen

Paso a paso

1 h 30 min
  1. 1

    Empezamos agrupando todos los ingredientes. Cortamos en brunoise la cebolla. Pelamos y cortamos en dados el boniato. Limpiamos de grasa la pechuga de pollo y la troceamos en dados grandes.

  2. 2

    Ponemos una cazuela al fuego con un chorrito de aceite y cuando esté caliente echamos la cebolla junto con un poquito de sal y el ajo en polvo, dejamos pochar a fuego medio-lento 10 minutos. Salpimentamos los dados de pollo y los agregamos a la cebolla y salteamos a fuego medio-alto 5 minutos, hasta que el pollo coja color. No os olvidéis de remover.

  3. 3

    Agregamos el boniato y dejamos a fuego medio-lento 10 minutos. Mientras cortamos la berenjena en dados, los agregamos a la cazuela y rehogamos 5 minutos.

  4. 4

    Añadimos la salsa de tomate y la pastilla de caldo de pollo desmenuzada, removemos y dejamos al fuego 10 minutos. Agregamos un vaso de agua y dejamos que se haga todo junto 25-30 minutos, hasta que el boniato esté blando.

  5. 5

    Ya tenemos nuestro plato listo. Servimos caliente y con un poquito de pan. Espero que os guste!!

Reacciones

Editar receta
Ver informe
Compartir

Cooksnaps

¿Cómo te salió? Recomienda esta receta mandando tu Cooksnap

Caricatura gris dibujada a mano de una cámara y una sartén con estrellas saliendo de la sartén

Comentarios

Escrita por

Ptega
Ptega @ptega
Santander
He de confesar, que nunca me había gustado la cocina, es más de chiquitilla solía huir de ella y casi lloraba cuando los Reyes me traían una cocinita. Es más hasta que me casé sólo entraba en la cocina por necesidad, por pura subsistencia, había que comer y de platos precocinados y carnes o pescados a la plancha no pasaba.Tras casarme, empecé a curiosear por Internet y a intentar elaborar las recetas que encontraba, a veces con más acierto y otras con menos y en ese tiempo descubrí que la cocina me relaja, que me gusta probar cosas nuevas, aunque a veces con las prisas acabamos con el sota, caballo y rey.Ahora os cuento un poquito de mi, soy, como dice una amiga, una viejoven. Me gusta pasar el tiempo con la gente que quiero, ansío cada año que llegue el 15 de mayo para volver al pueblo de mi infancia y reencontrarme con esos amigos que no necesitas ver a menudo para saber que han sido, son y serán las personas que con un gesto borran todas las tristezas.
Leer más

Recetas similares