Precalentar el horno a 175 grados, calor arriba y abajo

En una fuente pequeña de cristal troceamos el chocolate y la mantequilla y lo ponemos en el microondas, lo vamos calentando en periodos muy cortos de tiempo y vamos removiendo cada vez que lo saquemos, con cuidado de que no se nos queme, cuando veáis que está todo blandito sacarlo que se terminara de deshacer solo.

Cogemos nuestro molde y le ponemos mantequilla en fondo y paredes y esta vez también tenemos que poner papel de horno alrededor de nuestro molde, dejarlo unos dos dedos más alto que nuestro molde, va a crecer mucho el bizcocho

Separamos las claras de las yemas

A las claras les añadimos un poco de sal y empezamos a montarlas, a la mitad del batido añadimos el azúcar (solo la mitad unos 100gr.) batimos hasta obtener una consistencia firme y reservamos

Ahora vamos a batir las yemas con la vainilla, la leche y el resto del azúcar, cuando veamos que la mezcla se llena de espuma dejamos de batir

Mezclamos la levadura con la harina, la tamizamos sobre las yemas y empezamos a mezclar

Llegará un momento que la masa es tan espesa que no podemos mezclar, entonces añadiremos leche de poco en poco y mezclamos hasta conseguir una textura espesa pero que la podamos manejar. (echar la leche de muy poca en muy poca cantidad, más o menos cada vez que tengáis que echar, de un vaso la medida de un dedo más o menos)

Cuando este nuestra masa lista añadiremos las claras montadas con movimientos envolventes

Vamos a dividir la masa en dos boles, algo menos de la mitad en un bol y el resto en el otro

En la parte que tiene menos echar el chocolate fundido y mezclar muy bien(con cuidado de no bajar las claras montadas)

Cogemos nuestro molde y primero ponemos una capa de masa sin chocolate, luego una de chocolate (no la extendáis, como caiga) otra sin chocolate

Con el mango de una cuchara meterlo en la mezcla y trazar rayas por todo el molde, ese será el dibujo que luego nos quedará

Lo metemos al horno y tardará unos 50 minutos más o menos

Comprobar con la aguja que sale seca

Desmoldar cuando haya perdido algo de calor y pasarlo a una rejilla hasta que se enfríe por completo.