Poner en una sartén con Aove la cebolla y el ajo picadito a freír. Cuando lo tengamos casi hecho añadir la carne salpimentada y (yo le pongo también un pelín de orégano y perejil)

Dejar que se haga unos 15m. Y añadir el vino blanco (unos 100 ml.) y el tomate frito triturado y un par de cucharadas soperas de tomate frito añadiendo sal y pimienta negra y dejar unos 5m. Que se integre bien y reservamos.

Por otro lado poner las placas en agua caliente 20m. Pasado el tiempo debemos escurrirlas, yo uso un paño de cocina.

Para la bechamel : poner un poco de mantequilla en una cacerola, cuando esté derretido añadir la harina poco a poco sin parar de remover y seguido poner la leche caliente igual poco a poco removiendo constantemente, por último añadir sal, nuez moscada y pimienta negra. (si nos quedan grumos pasarlo por la batidora con la espumidera y listo). 😉

Poner en la base de una bandeja para el horno mantequilla y a continuación una capa de bechamel y placas de pasta y capa de carne después placa de pasta y otra vez carne así hasta terminar con ambas.

Después poner cubriendo todo la bechamel y el queso para gratinar y meter en horno previamente caliente a 180° por arriba y por abajo 15/20m. Si vemos que no se gratinar poner el ventilador o el grill los últimos minutos.