En una sartén, con un poco de aceite, hacemos los champiñones y las setas cardo. Retiramos y reservamos.

Cortamos las pechugas en filetes de un dedo de grosor. Y luego las volvemos a cortar en tiras regulares para hacer las lágrimas. Pasamos las lágrimas por huevo y pan rallado, con ajo y perejil, y las freímos hasta que estén doradas.
Retiramos y ponemos a escurrir sobre papel para que absorba el aceite

Añadimos el queso azul cortado en trozos o en láminas y bajamos el fuego para evitar que se queme.
Lo vamos deshaciendo poco a poco y cuando esté fundido, añadimos la nata de cocinar.
Subimos un poco el fuego y cocinamos unos 5’ hasta que reduzca la nata y la salsa adquiera la consistencia que deseamos.
Debemos remover de vez en cuando para evitar que se pegue.
El queso azul ya tiene sal, así que -ojo!!!- antes de rectificar de sal probar primero.
Añadimos pimienta al gusto.
Salsa lista

Emplatamos las lágrimas, las setas y los champiñones y vertemos un poco de salsa sobre ellas en cada plato.

#mitruco Si vas justo de tiempo y no puedes liarte ni pringarte empanando las pechugas, puedes ahorrar tiempo utilizando los filetes de pechugas que se venden ya empanados y los cortamos en tiras. No es lo mismo pero…