Roscón de hojaldre para Reyes, fácil, rápido y económico

Preparación del Roscón de hojaldre para Reyes:
Desenrollamos las planchas de hojaldre muy frío y lo estiramos un poco con las manos. Pincelamos una plancha de hojaldre con un poco de agua para cuando le coloquemos la otra capa encima se adhiera (Foto 1), seguidamente colocamos la otra pancha de hojaldre encima y presionamos ligeramente una contra la otra.

Con un cortador o recipiente de 13 centímetros de diámetro aproximadamente recortamos el agujero central (Foto 2) y colocamos la rosca con el papel de horno sobre una bandeja plana y reservamos en la nevera.

Añadimos al azúcar una cucharadita de agua para humedecerlo y que quede con textura de arena húmeda (Foto 3), cortamos la fruta escarchada con algún cortador con forma de estrellita o a nuestro gusto.

Pincelamos por encima toda la rosca con el huevo batido y colocamos por encima el azúcar húmedo a montoncitos de forma que quede bonito, del mismo modo repartimos las guindas y las frutas escarchadas presionando un poco para que queden fijadas al hojaldre (Foto 4).

Preparación del relleno:
Ponemos la mitad de la nata muy fría en un recipiente amplio y con varillas eléctricas batimos un poco a velocidad media, añadimos la mitad del azúcar glas y batimos un poco más, seguidamente añadimos el resto del azúcar y seguimos batiendo hasta que este firme y se formen surcos profundos (Foto 5).

El resto de la nata la vertemos en otro recipiente batimos un poquito y le añadimos el cacao en polvo, también añadimos la mitad del azúcar mezclamos bien y batimos un poquito, añadimos el resto del azúcar y seguimos batiendo a velocidad media hasta que este firme y se formen surcos profundos (Foto 6).

Colocamos la nata y la trufa en mangas pasteleras con boquillas rizadas y vamos a montar el roscón. Cortamos con cuchillo de sierra por la mitad el roscón, para que una vez relleno nos coincida la parte de abajo con la de arriba os recomiendo que pongáis un palillo pinchado en cada parte uno arriba y otro abajo (Foto7).

Rellenamos el roscón formando filas de cada color para que se vea rallado por el contorno (Foto 8), colocamos la parte de arriba haciéndola coincidir con el palillo de abajo y presionamos ligeramente para asentar el hojaldre, lo dejamos reposar un par de horas en la nevera. Y listo para disfrutar nuestro roscón de hojaldre.
¡Probadlo os va a encantar!