Mientras se sellan, cortamos la cebolla y la zanahoria en cachitos pequeños. Una vez sellado el solomillo lo sacamos a un plato. Ponemos un poco mas de aceite en la olla y cocinamos la cebolla y la zanahoria a fuego suave hasta que la cebolla esté transparente, mientras lavamos y cortamos los champiñones.

Cuando esté la cebolla y la zanahoria blandita, añadimos los champiñones y dejamos que tornen a un color marroncito. Añadimos la mitad del vino y dejamos evaporar a fuego vivo, raspamos le fondo con una cuchara de madera para quitar los cachitos de pavo que se nos hayan podido quedar pegados. Cuando haya evaporado, añadimos el pavo, el resto del vino y dejamos evaporar el vino.

Añadimos agua hasta cubrir y llevamos a ebullición, mientras pelamos la patata, cuando haya empezado a hervir cascamos la patata sobre la olla, mejor cascar que partir porque así la patata soltará el almidón y nos ayudará a que la salsa coja cuerpo. Dejamos cocinar hasta que la patata y el solomillo estén blanditos, unos 30 minutos