Primero vamos a empezar con la guarnición de patatas.

Pelar las patatas y córtalas en rodajas no muy gruesas, si se utiliza una mandolina es más rápido.

Pelar la cebolla y cortarlas en tiras finitas, o utilizar la mandolina, y luego con unas tijeras cortar las rodajas en dos.

Poner las patatas junto con la cebolla, en una bandeja de horno.

Precalienta el horno a 160ºC con calor arriba y abajo.

Pela el ajo y pícalo muy finito y echarlo por encima de las patatas.

Espolvorear las patatas con hierbas provenzales o hierbas al gusto y un poco de pimienta blanca molida.

Echar por encima las 4 cucharadas de aceite y un poco de sal y remover para que todas las patatas se impregnen.

Lo ideal es poner las patatas lo más expandidas posibles, es decir no poner muchas unas encimas de otras para que se cocinen bien.

Cubrir la bandeja por completo con papel de aluminio y hornear durante 1 hora para que las patatas queden tiernas.

Si no tenéis tiempo también se pueden hacer en el microondas. Para ello seguir los mismos pasos, y cocinar en un recipiente apto para el microondas, sin tapar con papel aluminio, durante unos 12 minutos, comprobar que están tiernas, si no dejarlas unos minutos más.

Al cabo de ese tiempo destápalas, añadir el vino blanco, y hornear unos 10 minutos más. Reservar.
Si la patatas se han hecho al microondas para este paso hay que ponerlas en la bandeja de horno convencional, y hornear durante 10 minutos.

Ahora es el momento de comenzará preparar la merluza.

Poner el horno a 180ºC

Echar sal a los filetes o trozos de merluza, (yo hice un paquete de 5 trozos de merluza congelada y lo descongelándola antes).

En un bol mezclar la mostaza, la miel, los ajos, el pimentón, la pimienta y el aceite de oliva al gusto, mezclar todo.

Colocar los filetes sobre las patatas, poner el preparado anterior encima de los filetes, y cubrir con papel de aluminio. Hornear durante 10 minutos.

Retirar el papel de aluminio y gratinar unos 5 minutos.

Sacar del horno y decorar con perejil por encima (opcional).